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Sillares y mampuestos

árabe

o arábigo/a

Califica genéricamente el arte producido en cualquier parte del globo tanto por pueblos antiguos como contemporáneos que profesan la religión del islam. Sus raíces étnicas se hallan en la península arábiga —delimitada por el golfo Pérsico, el golfo de Adén y el mar Rojo—. Como sinónimos de árabe se usan también islámico y musulmán en una acepción más estricta, pues mientras lo árabe debería quedar circunscrito al ámbito geográfico (oriundo de Arabia) y al dominio lingüístico (el idioma), las voces «islámico» (‘sometido a Dios’) y «musulmán» (‘creyente’) están directamente vinculadas a la fe del Profeta y presentan por tanto, también en el terreno artístico, connotaciones religiosas que «árabe» no tiene, y que determinan los rasgos más destacables de este arte oriental (véase este artículo).

El arte árabe no presenta una homogeneidad susceptible de división o clasificación. Sin embargo, su sincretismo vertebra, con un muy reconocible denominador común, las múltiples escuelas que surgieron en las regiones que abarcaba el vasto Imperio islámico desde el Indo hasta el Duero. La falta de cultura propia predispuso a la adopción de las formas artísticas imperantes en los países sometidos a la Media Luna.

Condicionado el arte árabe por los preceptos coránicos —o cuando menos por su interpretación—, que le impiden el desarrollo figurativo de la escultura y la pintura, se ve abocado ineludiblemente al cultivo masivo de la ornamentación vegetal y geométrica como rasgo identitario de su producción artística (véase este artículo).

Cuando el arte árabe se asienta manu militari en la península ibérica a partir del 711 no es ajeno a las formas romanovisigodas que se le ofrecen; con ellas y con los aportes norteafricanos (almohades y almorávides), profundamente imbuidos de las formas orientales, termina configurándose como arte hispanomusulmán andalusí. Cabe advertir que la producción plástica de al-Ándalus se asentó de manera tan fecunda en la Península en sus setecientos años de historia que perduró largo tiempo todavía tras la Reconquista, contemporizando alalimón con el estilo (1) mudéjar, su directo sucesor. Un ejemplo muy elocuente, pero no el único, lo hallamos en las numerosas obras de sesgo islámico que se llevaron a cabo en el Real Alcázar de Sevilla por reyes cristianos casi dos siglos después de la toma de la capital del Guadalquivir por Fernando III el Santo.

Estas son las principales señas de identidad del arte árabe:

Un sincretismo inteligente que sabe fusionar con sus propias raíces el legado artístico de otras culturas.

Un aniconismo religioso que potencia el desarrollo de las formas abstractas vegetales, geométricas y caligráficas —hasta convertirlas en seña de identidad— a base de arabescos, atauriques y mocárabes.

El predominio de materiales modestos como el tapial (2), la teja de barro, el mampuesto, el ladrillo y el yeso (1), alcanzando con este último ornamentaciones desconocidas hasta entonces.

La mezquita y el palacio real se instituyen como los principales ejes vertebradores de la expresión arquitectónica.

artesonados de madera armados con complejos entrelazados (2).

Simbiosis muy estrecha entre arquitectura, agua y jardines.

 Exhuberante decoración interior en contrate con la austeridad exterior de sus construcciones, especialmente en el mundo árabe de Occidente.

Uso reiterado de la columna —que al principio reutilizaba tomándola casi siempre de monumentos romanos y bizantinos— como elemento multiplicador de espacios.

Énfasis identitario de la cúpula apuntada, sobre todo en Oriente, con mayor o menor aguzamiento, según regiones.

Profusa propagación de un preexistente —y reinterpretado— arco de herradura.

Omeya.

 

 

Museo de Arte Islámico. Doha (Qatar). 2008.

Gran mezquita de Kairuán. Túnez.
Siglo VIII.

Salón de Pavones. Alcázar Real. Sevilla. Siglo XIV.

 

Patio del Yeso. Alcázar almohade de Sevilla. Siglo XII.

Alminar en ladrillo de la Giralda. Sevilla.
Siglo XII.

Murallas de tapial de la medina de Tarudant
(Marruecos). Siglo XVI.

 

 

♣ (clica encima de las imágenes)