Sillares y mampuestos
confesonario
(Es impropio llamarlo ‘confesionario’: manual del confesor y del penitente. Ver este artículo.)
Sagrado habitáculo donde se celebra el sacramento de la penitencia en una iglesia católica. Su uso se generalizó a partir del concilio de Trento (1545-1563). Fabricado por lo común en madera, es transportable en la mayoría de los casos. Adopta infinidad de estilos y diseños: desde el de apariencia muy humilde, semejante a un cajón grande o armario sin ornato aparente, al suntuoso y solemne, de rica labra (3), cual ambiciosa obra (1) de arte. Hay también confesonarios de obra (3) encastrados en el muro, integrados en la fábrica arquitectónica (muy escasos en España y especialmente presentes en el norte de Italia, en Austria y Alemania).
El confesonario tradicional dispone de un asiento interior para el confesor y una ventanilla con celosía a cada lado para oír la confesión de las mujeres, que se arrodillan por fuera a un costado del confesonario; cuando la parte frontal queda diáfana —en la mayoría de los casos— suelen los hombres confesarse por ella, y hacen servir la misma portezuela del confesonario como reclinatorio. El confesonario moderno no hace distinción de sexos y se presenta cerrado y con puertas, dotado de compartimentos individuales para confesor y penitente, con un mejor acomodo y mayor reserva.
El confesonario, sin embargo, tiene hoy muy poco uso y en algunas iglesias ha sido ya retirado.

Basílica de San José. Barrio de Flores,
Buenos Aires. En este confesonario
hizo su primera confesión siendo niño
el papa Francisco.
♣ (clica encima de las imágenes)
Tipos de confesonarios (preámbulo a la colección fotográfica de confesonarios del autor de este glosario)